El rescate financiero de los Estados Unidos a la Argentina a través de un swap de divisas por US$ 20.000 millones tiene fuertes repercusiones en ese país, al punto que mereció un extenso artículo del gigante el periodismo The New York Times donde se denuncian las intenciones que operan detrás del gran anuncio.
Para los periodistas Alan Rappeport y Maria Abi-Habib, el acuerdo beneficiará directamente a grandes inversores internacionales y gestores de fondos de cobertura que tienen estrechos vínculos con el secretario del Tesoro, Scott Bessent, más allá de los objetivos geopolíticos del gobierno de Donald Trump.
Muchos de ellos sería, según NYT, «los dirigidos por amigos de Bessent” como BlackRock, Fidelity y Pimco, que están fuertemente invertidos en el país. También se nombra a inversores como Stanley Druckenmiller y Robert Citrone, quienes trabajaron con Bessent en el pasado cuando éste era inversor para George Soros.









